El lunar hindú de la frente se llama tilaka, originariamente lo llevaban los hombres y tenía un significado religioso, ya que indicaba la secta a la que pertenecían.
El color (rojo, amarillo...) variaba según la divinidad a la que adoraban, Shiva, Visnú, etc. Sin embargo, en el caso de las mujeres, el tilaka, si es de color rojo, indica que son mujeres casadas. Al parecer, existá la costumbre de que el novio dibujaba una señal con su propia sangre en la frente de su futura esposa como símbolo del compromiso matrimonial (igual que el anillo en nuestro país).
Actualmente, la costumbre continúa, aunque la sangre ha sido sustituida por tinte y, si la mujer se queda viuda, se lo ha de quitar. Las chicas jóvenes y las niñas también llevan tilakas de colores, pero con una intención decorativa.
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